De nuevo aqui

En esta ciudad de la que nunca me alejo del todo.

Recorro de nuevo sus calles, sus plazas. Recorro también, con la mirada sus tejados y el horizonte.

Y las puestas de sol sobre los campos amarillos.

Regreso de Sintra.

Del color verde de sus montañas, de sus calles y carreteras empinadas, de las rojas puestas de sol sobre el atlántico.

De los paseos entre pinares en Colares, de los acantilados del Cabo da Rocha, de los cielos estrellados de Cascais.

De los adoquines blanquinegros de Lisboa, de los bolos de la Suiça en la Praça do Rossio, de la mirada perdida sobre el mirador de sta Luzia...

Regreso. Sabiendo que nunca me voy de allí tampoco. Con el deseo de volver pronto a ese país que cada vez siento más cerca, más mio, más dentro.

Lecturas, paseos, las voces de los niños, sus risas, sus historias compartidas con nosotros, los juegos por la noche alrededor de la mesa, el pequeño río camino del mar, el viejo tranvía bajando y subiendo, incansable -103 años!!!- de Sintra a Praia das Maças, y de la playa a Sintra, los paseos con Jara al amanecer por el bosque...

Y más cosas.

Algunas se han quedado allí. Para cuando regrese.

Hoy estoy de nuevo aquí.

En esta ciudad que nunca será mía pero, de la que nunca me alejo del todo.